lunes, 13 de noviembre de 2023

Ética y política. Un asunto olvidado.

Ética y política. Un asunto olvidado.


Quizá no se recuerde mucho a Elías Díaz. Sin embargo todavía hoy es uno de los mejores representantes de la Filosofía Jurídica española. En los inicios de su carrera académica colaboró con Joaquín Ruiz-Giménez y José Luis López Aranguren y en Italia con los profesores Norberto Bobbio y Renato Treves, por lo que en su formación tuvo como guía a los principales teóricos de la filosofía ética contemporánea en España e Italia. Durante muchos años ejerció su cátedra en la Universidad Autónoma de Madrid, habiendo formado a muchas generaciones juristas en su disciplina.

 

También fue un referente en la lucha antifranquista, siendo cofundador de Cuadernos para el Diálogo, revista esencial durante la etapa final de la dictadura y la Transición. Fue director de la revista Sistema en su  fundación en 1973, vinculada al Partido Socialista Obrero Español y cuya Fundación estuvo presidida por Alfonso Guerra.


En 1993 escribió una obra breve pero enormemente influyente que es perfectamente válida en la actualidad y lo va a seguir siendo muchos años, ya que pertenece a las obras clásicas de la Filosofía del Derecho española y con relevancia en su ámbito internacionalmente. En esta obra abordaba uno de los asuntos más complejos de la democracia como es la relación que existe siempre entre los aspectos éticos del ejercicio de la política.

 

En ella se reflexiona sobre la necesaria ética que debe tener cualquier aspecto político, ya que la esencia democrática solo puede mantenerse si en la política rigen una determinadas leyes éticas que deben tenerse en cuenta al ejercitar la política. Esas leyes las va desgranando poco a poco y explicando su razón de ser. Es preciso referir que en aquel momento, en la etapa de redacción de esta obra, el Partido Socialista Obrero Español ya ejercía el poder con los gobiernos de Felipe González desde 1982.  Su vinculación con las ideas del Psoe eran evidentes por su vinculación además con la fundación Sistema.

 

 En el prólogo de la obra ya advierte la intención del libro como era advertir en sus propias palabras que el título del trabajo <<no trata directamente de este complejo problema>> para a continuación decir que ha empleado ese título que es suficiente descriptivo para advertir que esa situación de confrontación entre la ética y la política podría darse, indicando que  esas situaciones <<se dan o pueden darse en la práctica, espero que no irremediablemente y de forma total, en posiciones de enfrentamiento, de confrontación e, incluso, de mayor o menor contradicción>>. Acaba por señalar en esa introducción que la gente percibe este problema con <<especial agudeza y capacidad de percepción, aunque no se si también con alguna impotente y desalentada indiferencia>>.

 

Esta advertencia que realiza Elías Díaz parecería que está realizada en este momento histórico donde el gobierno en funciones Sánchez ha acordado con el arco parlamentario soberanista independentista un pacto para la próxima investidura de gobierno que incluye una amnistía para los políticos y participantes de los sucesos provocados en 2017 en la declaración de independencia de Cataluña, que duro 10 segundos.

 

En este caso concreto se están produciendo precisamente las reacciones de las que advierte Elías Díaz, posiciones de fuerte enfrentamiento y confrontación no ya entre los políticos, sino que ha trascendido a la calle y los ciudadanos en gran número está acudiendo a manifestaciones en las plazas públicas para protestar contra la medida. Por el contrario, otra parte no menos importante, militantes, y votantes de los partidos de la próxima coalición de gobierno miran el asunto con indiferencia y no creen que ello contraiga problema alguno. La conclusión es que se ha producido una polarización del país en dos mitades con el problema que ello conlleva y con los antecedentes históricos de una situación similar que no están tan lejanos.

 

La cuestión es si el gobierno en funciones ha actuado en esta ocasión en sus decisiones políticas con esa ética imprescindible que deben tener los actos políticos que señala Elías Díaz, para que no acabe convirtiéndose la política en algo alejada de la virtud que es necesaria y no acabe convirtiéndose en un lastre para la democracia.

 

La decisión hubiera sido mucho más correcta y conforme a las leyes éticas no escritas que deben presidir la claridad de las ofertas electorales a los posibles electores si ello se hubiera incluido en la oferta en las últimas elecciones y se hubiera dado la posibilidad de debatir las razones y posibles ventajas de una amnistía que ahora se introduce de una manera oportunista. Esto se aparta de los usos hasta el momento que se presuponen en una democracia en decisiones políticas del calado de la que se propone.

 

Aristóteles en Ética a Nicómaco, en el apartado que denomina Transición de la ética a la política, lo que indica que ya entendía que la política debe comportarse con las virtudes éticas, señalaba: <<los asuntos públicos son administrados por leyes, y son bien administrados por buenas leyes; y parece ser que sean indiferentes que sean o no escritas>>. Alude de ese modo a las leyes no escritas que presiden la racionalidad y el bien común como las costumbres.

 

Bien, esa costumbre no escrita de ser claro en las ofertas electorales con el electorado no se ha cumplido, al revés se ha hurtado la realidad de lo que se pensaba realizar una vez se han conseguido los votos en las elecciones. En palabras mas compresibles: se ha engañado al votante propio y al contrario.

2 comentarios:

  1. Que triste todo😢 Estoy que no me lo creo.

    ResponderEliminar
  2. Todo suele terminar.. antes de lo que podría parecer. Saludos

    ResponderEliminar